La aventura que ya tuve en navidad, trabajar en un barco realizando magia, continúa en la temporada de Semana Santa. Dos semanas navegando y compartiendo ilusiones con el pasaje pero también con los compañeros, una de las muchas cosas que me regala este trabajo. He tenido la oportunidad de intercambiar palabras con casi tod@s los tripulantes del buque y ningun@ se salva de ser genial. Se han creado amistades y se han compartido momentos que no olvidaré.
Gracias a la compañía Baleària por contar una vez más conmigo. Sin duda para repetir…
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